Extraterrestre historia basado en sucesos reales

Extraterrestre historia basado en sucesos reales

Hola me llamo Karol y tengo 25 años mi papa es constructor y él siempre me llevaba en sus viajes cuando yo tengo tiempo libre, esto es mi experiencia y voy a compartir con todos ustedes, acababa de terminar mi carrera de ingeniería, mi mama se había muerto en un accidente que tuvimos y es por eso que mi papa me lleva en sus viajes por que no quiere ir solo.

Mi padre se sentía culpable por la muerte de mi madre, desde allí desarrollo un sentido sobre protector que a veces me fastidiaba, mi papa me regalo una mejor amiga después de la muerte de mi madre que es una perra de raza pastor alemán llamado Tela, vivíamos en un lugar llamado Di napa un lugar mágico, boscoso y a la vez parecido muy místico.

Yo me acostumbraba correr por los bosques en las mañanas hasta en un acantilado donde me sentaba, presenciaba la tranquilidad y observaba el esplendor en todo mí alrededor, era un lugar agradable y allí donde tuve un encuentro por primera vez con algo muy extraño. Lugareños y pastores de ovejas me contaban historias sobre duendes y seres elementales que vagaban por el bosque.

Todas esas historias nunca me causo impresión, por el contrario me parecían fascinantes parte del folklor del lugar, le daban un toque de misticismo a todos asuntos, sin embargo cambiaría eso en un cierto día, fue una mañana cuando fui a correr como hacia habitualmente, Tela siempre se me adelantaba y sus ladrillos me guiaban en el largo sendero de rocas y eso me llevaba hasta el acantilado y en otras direcciones de difícil acceso que nunca me he atrevido a explorarlo por lo tupido y espesa vegetación.

Allí es fácil perderse y no poder salirse de ese lugar si uno se metiera allí, luego de recorrer el camino y logre ver a Tela ladrando con mucho nerviosismo a una zona, ladraba sin parar y algo le estaba poniendo en esa manera, así al llegar lo abrase y su corazón latía muy fuertemente estaba muy claro que algo le había asustado y su pelo en el lomo estaba erizado y a mí también me puse algo nerviosa.

El momentos se puso peor cando Tela se me escapo de las manos y se fue ladrando en dirección de una zona montada hasta perdiéndose de mi vista y eso me hizo gritar fuertemente de ella antes de ir corriendo atrás, me metí en esa zona y en unos minutos logre ver a mi perra echada en estado de sumisión y jadeándose, preocupada  la revise que todo estuvieran bien y le coloque una correa para irnos de ese lugar.

Pero antes de irnos vi a mi perra que estaba viendo algo fijamente, me quede estática en un momento para fijar que es lo que estaba mirando y olfateando, en mi mente pasaron mil ideas, animales, personas, duendes etc.  Me sentí observada y asechada de algo que no podía ver, nerviosa me quise retirar del lugar pero algo me llamo la atención era un gran claro en una arbolada frente a nosotras, el gran claro era bastante inusual porque está completamente limpio no había rocas, pastura ni árboles en esa pequeña zona circular, tan solo había un puñito de tierra negra que no le correspondía del  lugar.

Al fijarme bien era un claro de circunferencia  de unos 10 metros, otra cosa en ese lugar no había ruido de viento, aves ni ramas de árboles moverse, es como si en ese lugar no existiera el tiempo ni el sonido sin quise averiguar más comencé a rezar para regresar por el camino para no  perderme y por fortuna tela encontró el camino y regresamos a casa.

Llegando a casa revise a tela y note en unas de sus patas tiene tierra de color negro, me di cuenta que mis tenis estaba lleno de ese polvo negro que parecía tierra entonces recordé que en ese claro había ese tipo de tierra, no quise pensar más y me puse a barrer y juntar esa tierra luego coloque en un pequeño recipiente.

Por la noche llego mi padre y cenamos, no le quise contar nada de lo sucedido y solo nos quedamos platicando un buen rato, pero él fue por agua y se dio cuenta de la tierra rara que estaba en el recipiente, era restos de rocas magnetizadas y sílice, me pregunto dónde había encontrado el material raro y allí le conté toda la historia de lo que me había sucedido.

Él no me creyó y nos quedamos que él me acompañaría al día siguiente para volver en ese lugar. En la madrugada  Tela empezó a ladrar nerviosamente aruñando la puerta que quería salir de la habitación, quise calmar al animal pero fue inútil, me acerque a la ventana y vi al bosque que todo estaba silencio pero me sentí observada.

Sentí un frió extraño que erizo todo mi piel y luego vi algo extraño en el patio trasero, Tela se acercó lentamente en la puerta con los pelos erizado en su lomo y vi una sombra parado detrás del cerco un pequeño ser era delgado con una cabeza grande parecía que me observaba detenidamente, de inmediato pensé que las leyendas locales sobre duendes eran ciertas.

Lentamente prendí las potentes lámparas que teníamos instalado del patio y el patio trasero y logre ver el pequeño ser delgado color gris  con ojos grandes cubriéndose de la luz en su rostro  con sus delgadas manitas, rápidamente se metió en las malezas dentro del bosque.

Tela mi perra empezó a enloquecerse y rompió el seguro de la puerta luego salió corriendo detrás del ser, agarre una lámpara comencé a seguir y gritándole a mi padre. Me perdí en el bosque sin que escuchara el ladrido de Tela, comencé a sentir escalofríos en mi cuerpo  hasta que apareció mi padre y lo abrase fuertemente y me prometió que solo amanece iríamos a buscar a Tela.

Solo amaneció fuimos con mi papa junto con 2 empleados a buscar  a tela en el bosque, llevamos GPS para no perdernos,  en un momento no me importo deje perdido mi papa y sus empleados y me fui en ese lugar donde había visto el claro, llegando allí solo había silencio, de repente sentí mis oídos sordos y comencé a gritar fuertemente y detrás de un arbusto apareció el cuerpo de Tela, me acerque y me di cuenta que le habían arrancado sus órganos y cerebro brutalmente.

No había sangre ni restos de sus órganos, solo sus heridas como quemadas y cauterizadas, de repente apareció un ser de color gris azulado y observándome con un rostro con ojos grandes y como se carecía de labios y nariz con un tamaño de una persona adulta al igual que vi en la madrugada, de pronto movió uno de sus extremidades señalando a Tela que si como que quiso decir  murió  por provocarla a él, me fui encima de ese maldito ser y me topé con una barrera invisible, me hizo caer de espalda y de allí no supe nada más.

Todo se izó negro, al despertar sentí un fuerte dolor de cabeza y vi a mi padre con un rostro triste, luego recordé a Tela y quise levantarme pero no pude me caía en los brazos de mi padre, comencé a llorar desconsoladamente solo recordaba el cuerpo de mi perra y masacrada cruelmente por ese ser.

Ala noche escuche un zumbido en el bosque, me asome en la ventana y vi una luz brillante, me llene de odio agarre una pistola de mi padre y una lámpara y me fui a cobrar venganza por el asesinato de Tela, sabia donde iba encontrar ese ser, al llegar en el lugar cuando vi ya eran dos seres iguales, arriba de ellos estaba un objeto color gris como un platillo con luces brillando simultáneamente y abajo un oyó profundo, como si estaban excavando  y extrayendo algo dentro.

De repente la nave que estaba arriba me tiro una luz brillante cubrió todo mi cuerpo otra vez de allí no supe nada más. Luego sentí y abrí mis ojos y estaba sentada en una silla de mi tío que estaba kilómetros de mi cabaña, pude pararme y bajar por las escaleras, abajo encontré a mi tía diciéndome que todo iba a estar bien. Me di cuenta que ya habían pasado 2 meses, me había quedado en shock por 2 largos meses y por fin pude recuperar mi conciencia.

Unos meses después mi papa me trajo en mi tierra natal México, ahora se quien mato a mi querida perra Tela, fue un extraterrestre y tengo la esperanza de que ellos volverán algún día y quizá tendré la oportunidad y modo para cumplir mi venganza.

Anónimo